El artículo se propone comunicar algunos resultados de un estudio exploratorio que tuvo como objetivo examinar las prácticas de lectura de los docentes de nivel inicial de la Ciudad de Buenos Aires buscando indagar qué y cómo leen literatura no especializada, así como las significaciones que atribuyen a esta práctica. Se realizaron doce entrevistas no estructuradas a docentes en ejercicio con diversos grados de experiencia y ubicaciones geográficas diferentes. A partir de ellas, se concluyó que los docentes atribuyen una jerarquía baja a la lectura frente a otros consumos culturales asociados a la recreación y al tiempo libre, y que quienes dedican su tiempo a esta actividad lo hacen sobre todo en períodos de receso escolar. Agregado a esto, las lecturas adquieren distintas características y se realizan de distinto modo según el soporte material de lectura.